Descripción

Con Guise, Stefan Diez desarrolla un nuevo potencial de la tecnología LED en contacto con la materia: La luz emana de la propia pieza de vidrio, mientras la fuente lumínica permanece invisible. Logra de este modo un efecto mágico y, a la vez, plena funcionalidad. Por la gran transparencia del vidrio, cuando la lámpara está apagada casi desaparece. Encendida, define una presencia lumínica fluida y magnética.

La versión aplique de pared, con fisonomía diferenciada, consiste en un disco de vidrio que desprende un halo de luz perimetral, con la fuente led también oculta. Cuando está apagada se mimetiza con el fondo mural, encendida evoca un eclipse de sol.